25 agosto 2010

¿Qué es la ósmosis inversa?

La osmosis inversa, como tal, es un procedimiento que garantiza el tratamiento desalinizador físico, químico y bacteriológico del agua. Este sistema es una excelente elección para el tratamiento de aguas ya que la alta capacidad de filtración y selección de la membrana de ósmosis lo convierte en un diseño de bajo mantenimiento aplicable en todo tipo aguas de suministro público e industrial.

Funcionamiento
Su funcionamiento se debe a una membrana de poliamida semipermeable, enrollada en espiral, que actúa de filtro, reteniendo y eliminando la mayor parte de las sales disueltas al tiempo que impiden el paso de las bacterias y los virus, obteniéndose una agua pura y esterilizada.

Las aguas con un elevado contenido de sales como son sodio, calcio, boro, hierro, cloruros, sulfatos, nitratos y bicarbonatos, entre otros, pueden ser tratados con la ósmosis inversa hasta alcanzar los límites considerados como agua aceptable para su utilización.

Partes
Los equipos de osmosis inversa se dividen en tres partes:

1. La membrana filtrante: son la clave y responsable de separar las sales del agua. Dicha membrana puede considerarse como filtros moleculares. El tamaño de los poros de estos filtros membranas es extremadamente reducido, por lo que se requiere una presión considerable para hacer pasar cantidades de agua a través de ella. Las suciedades que quedan en la membrana son posteriormente arrastradas y lavadas por la misma corriente de agua que va al desagüe. De esta forma el sistema realiza una autolimpieza constante.

Esta corriente de agua de desperdicio necesaria, está en relación directa con el tipo de membrana que se utiliza y sus exigencias.

2. Los prefiltros: las membranas sintéticas son relativamente sensibles al cloro. Es por esta razón que se utiliza unos prefiltros de carbón activo, quién atrapa esta sustancia. Existe otro prefiltro que permite capturar los sedimentos mayores de 5 micras. Al utilizar estos prefiltros permite alargar la vida de la membrana, ya que, eliminamos el cloro y se impide que la membrana se tapone con las arenas o por la frotación de estas.

Es importante tener en cuenta que estos prefiltros tienen una vida útil, por lo que deben ser reemplazados.

3. Post-filtro: Está diseñado para mejorar el gusto y finalizar el ciclo de la osmosis mejorando el agua y dejándola en las mejores condiciones para el consumidor. Elimina cualquier residuo, impurezas y olores del depósito y de las conducciones.

Aquí os mostramos un esquema de cómo sería la instalación de un equipo de ósmosis inversa doméstico: la entrada de agua del grifo de la calle pasa por el equipo de ósmosis donde la depura, siendo ésta almacenada en un tanque presurizado (normalmente de 8 litros). 



Instalación de las máquinas de ósmosis inversa domésticas
Normalmente se ubica bajo el fregadero donde hay que sacar una toma de la entrada de agua de la calle que va a la máquina de ósmosis y conectar al desagüe la correspondiente salida. El grifo dispensador del agua osmostizada se instala en la encimera junto al fregadero.

Aunque no es complicada su instalación sí que requiere de conocimientos básicos de fontanería tanto para hacer los distintos empalmes de las tomas, experiencia en perforar encimeras para instalar el grifo así como "vista" a la hora de distribuir los distintos elementos de la máquina para optimizar al máximo el espacio bajo la encimera y facilitar el posterior cambio de los filtros.

El cambio de filtros en cambio es bastante fácil y rápido. En próximas entradas hablaremos de la duración de los filtros, la sexta etapa remineralizadora y la lámpara ultravioleta para la ósmosis.

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